¿Cuál es el juego del gobierno Duque en la pandemia?

Por Isabel Santacruz

Editorial La Direkta

Duque se ha dedicado a generar una falsa expectativa de que pronto volveremos a la normalidad, alargando por cortos periodos de tiempo la cuarentena y de alguna manera  evadiendo la responsabilidad de proponer soluciones acordes con las necesidades del país

Colombia inició una flexibilización laboral de la cuarentena este 27 de abril, cuarentena que con deficiencias y pocas garantías lleva poco más del  mes, y así mismo se ha comenzado a flexibilizar.

La cuarentena comenzó el 24 de marzo y la situación mundial ya anunciaba que las medidas de confinamiento seguramente no terminarían el 13 de abril como lo había anunciado el gobierno.  Epidemiólogos como Guillermo Gonzálvez y Juan Simbaqueba recomendaron una cuarentena de 8 a 12 semanas y medidas de abastecimiento, flexibilización obligatoria de horarios y ambientes laborales saludables en el Foro permanente sobre Covid-19 del Concejo de Bogotá (1). 

Como se esperaba el 13 de abril Duque anunció que la cuarentena se alargaría hasta el 26 de abril aunque colegios y universidades seguirán hasta el 31 de mayo. Para esa fecha el doctor en salud pública Luis Jorge Hernández profesor de la Universidad de los Andes sugería que los periodos de restricción a la movilidad deberían durar de 6 meses a un año con una serie de medidas como la aplicación de pruebas masivamente, vigilancia epidemiológica, monitoreo de pacientes en tiempo real y un sistema de comunicación social (2), de esta manera obtener datos más cercanos con la realidad y tomar decisiones frente a las medidas de restricción a la movilidad. 

Manizales, 24 de marzo de 2020 – Imagen propia

Finalmente el 20 de abril Duque anunció que la cuarentena se iría hasta el 11 de mayo, que los adultos mayores tendrán restricción hasta el 30 de mayo y que está considerando permitir el retorno laboral del sector de construcción y manufactura tomando las medidas de salud necesarias.  

La cuarentena en Colombia ha evidenciado las grandes desigualdades sociales existentes. Nuestro país es un país de ocupación informal, según el DANE el 58% de los trabajadores son considerados informales y después de las medidas de confinamiento el 64% de los trabajadores informales quedaron en estado de vulnerabilidad (3). El Observatorio del trabajo de la Universidad del Rosario define trabajador vulnerable como aquel que no puede teletrabajar y no hace parte de los servicios esenciales como el agropecuario, producción y transporte de alimentos, salud y seguridad.

El desempleo debido al confinamiento, sumado a una débil estabilidad económica de los trabajadores que subsisten del diario o que sus ingresos apenas cubren lo vital y no cuentan con ahorros disponibles para resistir la cuarentena, enfrentar un sistema de salud ineficiente, que muchas veces ni siquiera los cubre, además de unas medidas gubernamentales que apenas llegan a un sector del total de la población afectada; está generando incertidumbre y temor frente a lo que depara el futuro, pues el hambre está a la orden del día y salir a trabajar o a exigir apoyo alimentario los pone igualmente en riesgo de contagio. 

Realmente es admirable, que en una situación sin precedentes como la actual crisis que vivimos, el gobierno siga permitiendo la corrupción sin castigarla y siga beneficiando al sector privado, mientras que los ciudadanos siguen en sus casas y en las calles buscando no morir de hambre.   

Da la impresión que Duque está jugando a mantener una falsa esperanza, es decir, el debate frente a las transformaciones sociales y culturales que genera esta situación se encuentra abierto y la necesidad de implementar políticas estructurales como la de una renta universal (4) o  tomar medidas económicas, sociales y ecológicas mediadas por las consultas tripartitas (gobierno, empleador y trabajador). Sin embargo, Duque se ha dedicado a generar una falsa expectativa de que pronto volveremos a la normalidad, alargando por cortos periodos de tiempo la cuarentena y de alguna manera  evadiendo la responsabilidad de proponer soluciones acordes con las necesidades del país para enfrentar esta situación, por el contrario, flexibiliza la cuarentena sin garantías básicas para los trabajadores, sin los datos correspondientes para tomar decisiones acertadas y exponiendo a cientos de empleados de los estratos sociales más vulnerados al contagio y a la muerte.  

El 12 de marzo anunció la emergencia sanitaria, que según comunicación oficial terminará el 30 de mayo. El 17 de marzo MinTrabajo en la circular 021 del 2020 exhortó a las empresas a promover y generar condiciones de teletrabajo aunque también autorizaba las vacaciones anticipadas o colectivas informadas con un día de anticipación.

El 9 de abril el viceministro de hacienda Juan Albeiro Londoño propuso que después del 27 de abril los días festivos pasaría a ser días laborables, evidentemente esto no sucedió, ni sucederá por ahora, pues el confinamiento continua y se esperan las consecuencias de la flexibilización. 

Peor aún, en la misma fecha se dieron a conocer los casos de sobrecostos en los mercados que estaban siendo entregados a las familias con contratos públicos (5), al mismo tiempo que la gente empezó a sospechar de números de cédula irreales que aparecían como beneficiarios en ingreso solidario, otro programa para la atención de personas vulnerables en medio del confinamiento (6). Y como para ponerle la cereza al pastel el 18 de abril FINAGRO la entidad encargada de apoyar al sector rural desembolsó $226 mil millones a grandes empresas mientras los pequeños productores ni siquiera han comenzado a recibir los apoyos (7). Realmente es admirable, que en una situación sin precedentes como la actual crisis que vivimos, el gobierno siga permitiendo la corrupción sin castigarla y siga beneficiando al sector privado, mientras que los ciudadanos siguen en sus casas y en las calles buscando no morir de hambre.   

Cali, 20 de abril de 2020 – Edward Lora

Es claro que ningún gobierno está preparado para afrontar esta pandemia, cada gobierno ha cometido errores y han tenido que asumirlo. El gobierno colombiano ha implementado algunas medidas sociales de atención, pero existe mucha inconformidad en nuestro país y con toda razón, se ha manejado la información de la población vulnerable de manera irresponsable, evidenciando el pésimo manejo de los datos y grandes focos de corrupción. De la misma forma se ha realizado el seguimiento del avance de la pandemia y se han tomando decisiones sin información real lo que pone en riesgo la vida de miles de ciudadanos.

Sumado a lo anterior, Duque no ha decidido tomar medidas a mediano y largo plazo, ha extendido la cuarentena por tercera vez para una parte de la población y convocó al retorno laboral del sector de la construcción y la manufactura, pasando por encima de las recomendaciones nacionales e internacionales y obviando los precedentes de países como Italia, España y Estados Unidos que tomaron medidas similares y colapsaron. 

Entonces ¿cuál es el juego de Duque? seguirá tomando medidas sociales insuficientes, al mismo tiempo que crea sus propias estadísticas para argumentar medidas que privilegian al sector privado y que pone en riesgo la vida de los trabajadores, ¿no es acaso el gobierno quien debe proteger nuestros derechos? o ¿Duque está dispuesto mantener los privilegios del sector privado a costa de la vida de los trabajadores?.

¿Duque está dispuesto mantener los privilegios del sector privado a costa de la vida de los trabajadores?

  1. bogotacomovamos.org/epidemiologos-hablan-sobre-la-cuarentena-por-covid-19/
  2. www.eltiempo.com/salud/cuarentena-obligatoria-se-amplia-por-dos-semanas-481834
  3. razonpublica.com/sector-informal-la-pandemia/
  4. lasillavacia.com/blogs/que-tal-una-renta-basica-universal-en-colombia-56091
  5. www.noticiasuno.com/nacional/brotan-mas-denuncias-en-las-regiones-sobre-presunta-corrupcion-en-contratos-para-donar-mercados/
  6. www.semana.com/semana-tv/semana-noticias/articulo/error-del-buscador-o-corrupcion-en-dineros-para-ingreso-solidario/662732
  7. elexpediente.co/escandalo-en-finagro-226-millones-en-creditos-para-el-campo-a-manos-de-estas-grandes-empresas/